Territorio marrón en la ciudad. Entrevista a Gabirela Ortega
28/05/2021 11:06

“25 de mayo, identidades, in/dependencias, indígenas, gauchos, inmigrantes, estereotipos, racismo, demasiadas ausencias, empanadas, mitos, pastelitos, demasiados varones.... ¿quién escribe la historia? Hoy la escribimos nosotres, con el perdón de les oyentes” - La Conspiración Inútil. 24 de mayo 2021.
El lunes pasado, en vísperas del “Día de la Patria”, el equipo de La Conspiración Inútil repasó las enormes ausencias que brillan en la escritura de la historia e Historia del país, la cual se inscribió en el imaginario colectivo a través de instituciones estatales como escuelas y museos. Tan eficaz fue la repetición del mito, que todavía hoy creemos en una Argentina blanca y europea, sin indixs ni afros.
Sin dudas, la corriente historiográfica vigente viene señalando dichas ausencias -hoy en boca de todx progre- y se desmarcó del mito, sin embargo, esta identidad nacional, blanca, impoluta, culta y europea -que nos "legaron los grandes héroes" (individuos varones)-, sigue presente en el teatro, los libros, la política, la educación, los feminismos, y un largo etcétera. Esto se extiende al plano de los derechos: lxs blancxs acceden “naturalmente” a ellos, mientras que una gran parte de la población que vive en el país tienen que soportar que su color de piel sea garantía de exclusiones, desconfianza, prejuicios, y razón suficiente de ser sospechosxs de algún delito.
Para ahondar sobre el tan argentino racismo estructural y la identidad nacional, conversamos con Gabriela Ortega, Maestra y Licenciada en Artes Plásticas especializada en Pintura y Candidata a Magíster en Museología por la Universidad Nacional de Tucumán. Ella es hija y nieta de migrantes bolivianos que llegaron a la Argentina a trabajar en los Ingenios Azucareros. Además de amar la cocina tradicional y de luchar por museos más justos, es integrante de Identidad Marrón (@identidadmarron) de Jujuy, un colectivo conformado por “un grupo de personas marrones unidas para debatir sobre el racismo estructural en Latinoamérica y buscar respuestas a ello”, como se definen en sus redes.
Gabriela dijo mucho y muy claro, por eso dejamos sus palabras acá . También pueden escucharla en el recorte o en Spotify.
. ¿Cómo y por qué surge Identidad Marrón? ¿Qué se propone?
El colectivo de Identidad Marrón viene trabajando hace aproximadamente unos 5 años en torno a la temática del racismo estructural. En estos momentos somos un grupo de personas que nos hemos unido desde Jujuy, así que se va expandiendo constantemente en sus integrantes. La idea es poder introducir nuestras vivencias dentro de los medios culturales políticos, hablar de la realidad que viven las personas marrones. Algunas nos identificamos como pobladores originarios, otras como personas que llevamos un color o un rasgo que nos hace tener historias de vida en común. Identidad Marrón viene a unirnos dentro de esta resistencia y lucha por ocupar ciertos espacios que históricamente nos fueron negados.
. Fechas patrias, identidad nacional, escuelas y museos
El tema de las fechas patrias saca a flor de piel ese sentimiento nacional con ciertas historias, personajes, elementos, objetos: todas las cosas que nos unen como pobladores de la nación argentina. Pero primero hay que aclarar que no hay una única identidad, son diversas, pero sí hay una identidad nacional que tiene ciertos valores, una historia en común y eso es lo que nos hace orgullosos de formar parte de una nación. Yo soy maestra y poder hablar de las fechas patrias en las escuelas es muy difícil, porque es ahí donde los niños empiezan a sentir este tema del racismo. Con las representaciones teatrales, sobre qué personajes podés o no representar de acuerdo a tu color de piel. Hay un meme que circula siempre en las redes que habla sobre la lista de colores, quién puede ser dama antigua.. Los niños marrones están acostumbrados a esto y obviamente eso afecta en nuestra seguridad al hablar, al elegir una carrera. Yo actualmente lo vivo desde otro lado, como docente, y se nota que el racismo está muy presente en la escuela, sobre todo en estas fechas, porque el racismo también viene desde el docente que elige qué se va a decir y quiénes lo van a decir.
El tema de la identidad nacional también tiene que ver con la invisibilización de esas personas. En los últimos años estamos viviendo una transformación donde otros personajes están empezando a ser visibilizados, como María Remedios del Valle. Esto tiene que ver con una cuestión política y una necesidad de los gobiernos de empezar a cambiar esa estructura. Lo que no quiere decir que el cambio sea rápido y que lo vayamos a ver impactado en todos los medios escolares o museos. Son todas instituciones que están operando en ese aparato ideológico que se empezó a gestar con las primeras revoluciones y después con la independencia argentina. Pasamos de ser colonizados, a perpetuar lo que hemos aprendido de esa colonización después de ser independientes. O sea que mucho no ha cambiado la situación para las personas que están siendo invisibilizadas, si no que la independencia trajo otro medio de opresión.
Los museos del Estado son quienes llevan adelante un mensaje mucho más fuerte porque son quienes oficializan las historias. Todo lo que está en los museos es un discurso sagrado que nadie va a deslegitimar, lo que está dicho ahí es porque fue elegido con anterioridad y muchos museos tienen un discurso que fue elegido ya en la época colonial. Si bien a partir de la década del cincuenta aproximadamente, desde la ciencia y la antropología, se dice que las razas no existen y eso es verdad, porque somos una sola especie humana, que no deberíamos tener diferenciaciones. Pero lo que tenemos que tener en cuenta es que el sistema con el que se formaron nuestros países sí era racista. Esto viene desde lo que se llama “encuentro cultural” con el descubrimiento de América, o redescubrimiento, como nos gusta decirle a nosotros. Ya ahí se establece una relación racista con los pueblos originarios y ya venían de una relación racista con los esclavos africanos. Entonces, si bien hoy el concepto de “raza” sería un concepto errado, el racismo sigue siendo porque nuestro país fue creado a base de sentimientos racistas.
En el caso de los esclavos africanos la consideración es que ellos no eran seres humanos, sino que eran animales. Esa fue la diferenciación del trato con el indigena, que era considerado otro ser humano, pero domesticable e inferior. Pero quienes venían a representar la esclavirtud no eran considerados seres humanos. Ahí está la diferencia entre lo que es ser indigena y ser afrodescendiente, es otra mirada del racismo.
. Restos humanos en museos
El objetivo de la Argentina, una vez que fue independiente, fue que podía ser igual que cualquier país de Europa. Adoptaron lo peor del colonialismo, como estas prácticas de someter al indigena, de someterlo a las peores verguenzas y a la muerte y luego a la objetivación para ser exhibidos como un objeto más del museo.
Tenemos dentro de los principales museos, como el de La Plata, los restos humanos de quienes fueron raptados y tomados prisioneros. Estas son historias que no están en el discurso del museo . Esas son cosas que vas aprendiendo en otros espacios y se van discutiendo.
El caso de las Momias de Llullaillaco viene a demostrar que ese paradigma no está completamente superado, ya que fueron saqueadas en pleno siglo XXI. Si bien estamos hablando del Museo de la Plata y todas cuestiones que pasaron allá en el 1800, si nos venimos a nuestra proximidad, las momias (que les llamamos momias, pero son niñas), siguen siendo exhibidas. En este caso, es una institución privada que paga los derechos de reproducción de imágenes y mantiene el espacio en el que ellas son conservadas en la temperatura en la que estaban en el volcán. Si bien se cree que hay una humanización de las prácticas arqueológicas, creemos que no es tan así. Hay una Ley de restitución de los restos humanos [Ley Nacional N° 25.517]. Lo que pasa con las niñas de Llullaillaco es que no se sabe bien desde dónde fueron traídas, pero desde un lugar muy lejano, entonces no hay una comunidad en Argentina que las reclame. Quedan a criterio del museo y al uso del turismo. Nosotros no podemos reclamar ser herederas de esos cuerpos, decir que son parte de nuestras comunidades o de nuestras familias.
Estar ahí en ese volcán, estar en contacto con esa parte de la naturaleza, también tenía un significado ceremonial, o sea que al sacarlas de ahí se las despoja de toda su ritualidad. Para nosotros sería atroz que alguien venga a un cementerio cualquiera y se le ocurra sacar cualquier resto humano de ahí, sin embargo no nos ha producido el impacto suficiente que sacaran las niñas de Llullaillaco y fue en el año 2000.
. Territorio: qué lugares podemos habitar
Cómo se instala el aparato ideológico de donde nos representamos, el espejo, no solo son los museos, también los monumentos. Los principales monumentos de la Argentina están dedicados a héroes. Y hay una segregación: casi no hay mujeres, sino que la mayoría son hombres que encarnan un ideal histórico, sobre los cuales nosotros nos representamos.
Desde Identidad Marrón para el Día de los Museos hemos lanzado en las redes un escrito que hablaba precisamente sobre los monumentos y la situación que estaba pasando con el derribamiento en Latinoamérica, que ya viene de hace un par de años, en Chile, en México y ahora Colombia, con el derribamiento que hizo el pueblo misak en determinadas ciudades. Lo particular de esto es que los medios colombianos emitían juicios sumamente racistas contra el pueblo misak con titulares como “Indígenas atacan a ciudadanos colombianos”. Lo que no cuentan los medios es cuáles son los motivos por los cuales el pueblo misak llega a esa determinación. Uno de los monumentos se encontraba sobre lo que era un cementerio indigena. El derribamiento no solamente es simbólico, sino que está directamente relacionado con el territorio y con lo que el territorio significa para los pueblos originarios.
Para nosotros, quienes habitamos las ciudades, el tema de los pueblos originarios nos impacta de otra manera desde la estructura social: los lugares que sí podemos habitar y los que no. Para darte un ejemplo cotidiano, yo he accedido a un sistema de educación pública que me ha dado otras herramientas para estar hoy aquí sentada. Pero hay otros pobladores que tienen mi misma historia que quizás no tienen acceso. Es un privilegio estar en estos espacios para mi. Vivo en estos momentos en lo que se considera, dentro de mi ciudad, uno de los mejores barrios, donde mis vecinos no tienen mi color.
Hace unos días atrás salgo a comprar, donde el verdulero no se extrañó de verme porque él es boliviano, entonces la mirada de él hacia mí no es la misma que la de otros vecinos. Caminando por la calle con mi hija en brazos, una vecina que no sabe que soy vecina, me pregunta si estoy pidiendo ropa. Ese es el estereotipo con el que cargamos, ese es el estigma: una persona que me ve caminando en este barrio cree que no tengo derecho de estar aquí. Piensa que como soy marrón, primero que debo ser pobre; segundo, que debo ser planera; y debo andar en este barrio pidiendo ropa, porque si no, no se explica mi presencia en el barrio. Ese es el estereotipo con el que cargamos las personas marrones y esa sería una vivencia cotidiana.
Pero hay otros estereotipos con el que cargan las personas que viven en determinadas regiones como Buenos Aires, en las villas. Es otra estigmatización que tiene más que ver con la violencia: por qué el gatillo fácil se da en personas marrones principalmente. Lo que es la identidad nacional influye en todas las estructuras, desde qué lugar ocupa el poblador originario y qué lugar ocupa la persona marrón. Una cosa es poblador originario y reconocerse como tal, y otra cosa es ser marrón, que quizás no te reconoces como originaria, pero tu color lleva una estigmatización, un fenotipo de qué lugar ocupas para esta sociedad nacional.
El comentario que me hacen es “no hablas como jujeña”, porque también hay una estereotipación de que si soy marrón probablemente debería tener dos trenzas y probablemente tendría que hablar con un acento particular que caracteriza a la gente de Jujuy. Una persona de Jujuy no podría ser instruida, no podría tener otro lenguaje, otro léxico. Aún cuando estamos habitando otros espacios, todavía esa cosa existe y no es que sea intencional. Por eso el tema de Identidad Marrón no es el escrache, si no que es crear conciencia de que hay una estructura que te hacer pensar de cierta manera, que te hace creer que en Jujuy no hay personas blancas, que son todos marrones, que la gente marrón vive en la Quebrada, que no hay ciudades. También el juicio de cuán originario sos de acuerdo a tu color y de acuerdo a eso, si tu lucha es o no legítima también.
Terricidio
Desde Identidad Marrón ya viene hace tiempo instalando el tema del racismo estructural en distintas instituciones fuertes, como son los museos. También ahora con el tema de la virtualidad en muchos medios virtuales ha estado interviniendo, porque está compuesto por muchas personas de distintas áreas, entonces cada uno puede activar desde su especificidad el tema del antirracismo en su área. Si siguen el Instagram van a estar en contacto con la gente y las acciones que se vienen haciendo. Estamos muy presentes en las redes y no se deja en ningún momento que este empuje frene, si no que constantemente hay actividades nuevas. Vayan siguiendo las informaciones porque constantemente estamos haciendo cosas.
Hace poco fue la caminata que culminó ahora el 22 de las Mujeres indígenas por el Buen Vivir. Desde Jujuy hicimos una acción artística, pero en buenos aires Identidad Marrón estuvo acompañado al Movimiento en la culminación de la caminata. Y precisamente tenía que ver con lo que hablábamos del territorio y de lo que significa para los pueblos originarios y para nosotros los urbanizados, que estamos lejos de nuestro territorio y nos creemos que no somos indígenas porque no hemos seguido dentro de una comunidad. o no continuamos con ciertas prácticas en nuestra vida diaria. Pero el territorio es algo mucho más amplio que el espacio físico. Incluye simbolismos y vivencias, creencias: el territorio es un lugar desde donde conectamos con esos antepasados.
El motivo de la caminata era precisamente denunciar el terricidio, pedir al Estado que tome cartas en el asunto, en la explotacion del medioamibiemte, la megamineria, el epistemisidio, que se reconozca el genocidio indígena y todo lo que implicó para las comunidades originarias, que han tenido que correrse de sus territorios por la presión de los gobiernos. Están perdiendo sus recursos naturales. Siguen luchando a pesar que la Constitución Nacional los reconoce como preexistentes.
En la jornada que hicimos en Jujuy estuvo Rosana Puca, integrante del Movimiento, que es de una comunidad en Tilcara, que no es un lugar remoto en Jujuy, si no el centro turístico.Sin embargo hay comunidades en Tilcara que no tienen agua, y hay hoteles que tienen piscina. El reclamo de las Mujeres Indígenas es super importante e histórico y nos ha llevado a plantearnos, como colectivo, qué es el territorio y qué significa para nosotros poder crear este territorio marrón en la ciudad. Por ahí está yendo nuestra lucha.